¡Feliz año nuevo!
Con lo bien que iba y, al final, se equivoca de año, ¡ja,ja! Claro que peor fue esta pobre mujer, que iba hablando sin poder ver el reloj y así salió lo que salió:
En fin, que no se os olvide que la quinta es la una y la sexta es la dos, como cantaba Mecano. Aunque yo, lo que no entenderé nunca, es que teniendo un año entero para comer uvas, haya que engullirlas en un minuto y empezar el año con dos o tres uvas en el plato, la boca llena que no puedes ni tragar, medio ahogado si te atragantas con una uva... ¡Qué ganas de sufrir!
¡Feliz año a todos!
Etiquetas: amigos el tiempo pasa