jueves, enero 31, 2008

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domingo, enero 27, 2008

Sacrificio de animales


Esto esta alejado de los contenidos del blog que siempre han sido culturales . Si considerais que no pega pues lo borro y en paz.
Es que me indignan ciertas cosas, me indigna el falso ecologismo o por lo menos a mi me lo parece falso. Y siempre he pensado que primero somos nosotros, los de casa.
Y tambien porque da la casualidad que si me importa el sufrimiento de los animales.
http://layijadeneurabia.com/2008/01/26/
matadero-del-grupo-coren-introducira-rito-halal/

La forma de sacrificio de los animales como marcan las leyes musulmanas y si no me equivoco tambien las judias, es mil veces mas cruel y sangrienta que el que se utiliza normalmente en los mataderos y bastante mas cruel que el metodo tradicional de "matanza" de nuestros cerdos y que se ha llevado a cabo hasta hace bien poquito en todos los pueblos de España.
Pero claro hay que ser progre y tener en cuenta eso de la multiculturidad.

miércoles, enero 23, 2008

Las cien mejores fotos del año

Las mejores fotos del 2007 segun la agencia reuters.



Las podeis ver todas en http://www.news.com.au/gallery/large/0,25692,5027964-5014991-1,00.html

viernes, enero 18, 2008

Mi infancia

Cuando era pequeña, en el mismo bloque donde vivía, había tres niños más. Dos de ellos eran hermanos. Héctor, David y Natalia, mis vecinos de la infancia, compartieron conmigo muchos momentos inolvidables. Isa vivía en el bloque de al lado y se nos unía. Era la mayor.
Nos reuníamos en el patio y allí dábamos rienda suelta a nuestra imaginación. A veces, convertíamos aquel espacio entero en una casa colocábamos juguetes ubicados según “las habitaciones”. Recuerdo que una vez, Natalia se bajó un teléfono rojo, viejo, y lo colgamos en una pared del edificio. Nos encantaba hacer que nos llamaban. El banco del patio era el sofá y el tronco talado de un árbol que había justo delante era la tele.Hacíamos lo que se suponía que hacía una familia.
Durante una época, nos dio por jugar con unas raquetas de plástico y una pelota amarilla de espuma, a tenis o a frontón. David y Héctor competían por ver quién era el mejor. Natalia y yo jugábamos a veces a las gomas de saltar, cantando aquello de:
Fortunato, Fortunato,
no es un perro ni es un gato,
es un lobo muy sensato,
nuestro amigo Fortunato
A veces hacíamos bailes, o íbamos al bar de “Las Parras” a comprar bolsas de pipas Plis Plas, que eran pequeñas y valían a duro. La dueña se enfadaba cuando le pedíamos un vaso de agua.
Nuestras madres nos lanzaban los bocatas de chorizo o de Nocilla por la ventana. A David y a Natalia, su madre les cortaba los bordes del Bimbo. Si hacía frío, nos tiraban chaquetas.
A veces pintábamos el suelo con tizas de colores y dibujábamos una charranca para jugar.
Íbamos al kiosco de la Frigo, al final de la calle, a comprar polos. Yo le pedía una moneda de 25 pesetas a mi madre y con eso me compraba un Popeye de naranja o de limón. A Héctor le encantaban los de leche, y como tenía los dientes muy sensibles, los chupaba sin morderlos nunca y le duraban más.
A David le dio una temporada por los luchacos. Se los hizo su padre con dos palos de madera, unidos por una cadena y forrados de cinta aislante.
Natalia se enfadaba por nada y lloraba a menudo. Era la pequeña, hasta que aparecía Samantha, Sammy, nieta de una vecina del bloque. Entonces las dos se juntaban y se olvidaban de nosotros.
A veces también se nos unían Joan o Irene y hacíamos una buena piña.
En el patio no nos dejaban jugar a pelota. La “momia”, así la llamábamos, se asomaba a la ventana y nos llamaba la atención. Decía que la pelota rebotaba en su pared y eso le daba dolor de cabeza. Un vecino andaluz se asomaba a la ventana y gritaba: “No sus acustumeis a jugar” . Desde entonces le bautizamos como el “Nosuacutumei”.
Una tarde, estábamos hartos de tantas quejas pese a que sabíamos que éramos niños muy buenos, nada gamberros. Entonces, nuestro modo de queja fue crear ANCEV, la Asociación de Niños Contra El Vecindario. Pintamos nuestras siglas en la pared del bloque, y tardaron bastante en borrarse. Fue nuestra única forma de manifestación en contra de unos vecinos, la mayoría mayores, que no entendían que ¡no éramos más que niños! Otras veces nos bronqueaban por llenar el patio de pipas. Se nos cortaban los labios de la sal, pero no podíamos parar.
Una tarde, jugábamos al escondite, y Natalia se escondió detrás de un coche, en la cera de enfrente. Pasaba en aquellos momentos un coche de policía, que no dudó en pararse a mirar qué pasaba, pensándose que alguien se ocultaba de ellos. Ella se llevó un buen susto y al poli se le quedó cara de imbécil.
También jugábamos al pica pared y hacíamos trampas.
Nuestras frases eran:
¡Tú la paras!
¡Yo no mago!
¡Maricón el último!
¡Polis y cacos!
¡Peste alta!
¡Peste baja!
¡Tengui!
¡Falti!
Uno de los mejores regalos que le hicieron a Héctor unos Reyes, fue una grabadora. Nos grabábamos haciendo radionovelas, series, programas, o simplemente diciendo tonterías. También le regalaron un órgano Casio PT1, que nos encantó a todos porque llevaba melodías grabadas y tocábamos las teclas como si fuéramos nosotros los que hiciésemos música.
Durante una época también nos dio por jugar a póker. Nos apostábamos las fichas del Conecta 4, como si estuviéramos en un casino.
A mí, una vecina marimacho de otro bloque, me robó mi Chabel y aquello me afectó mucho. Como tenía muchos hermanos, uno de ellos me amenazó diciendo que si volvía a decir que su hermana me había robado la muñeca me iba a cascar. Días después, me encontré una bolsa en el patio, con la Chabel y los accesorios dentro, pero sucios y muy estropeados.
El mejor regalo de Reyes de mi vida fue la Caravana de la Chabel. Nunca lo olvidaré. Aún la guardo.
Ahora Natalia, David y Héctor siguen viviendo en el mismo bloque. Natalia lleva temas de estética y tiene novio, David tiene novia y trabaja arreglando trenes, Héctor es comercial. Yo periodista.
En realidad, cuando nos vemos, por separado (no hemos vuelto a quedar todos juntos), sabemos que somos los mismos y aún tenemos una conexión especial, que nos hace reírnos y entender nuestras cosas. En más de una ocasión recordamos que hemos sido ANCEV. Eso no se le olvida a una en la vida. Porque aquellos días eran auténticamente baratos y extraordinariamente felices.

miércoles, enero 16, 2008

La riqueza del castellano

Un ejemplo de la riqueza del lenguaje castellano es el número y acepciones de una simple palabra, como puede ser la muy conocida y frecuentemente utilizada referencia a los atributos masculinos, "cojones".
Si va acompañada de un numeral, tiene significados distintos según el número utilizado. Así:
"uno" significa "caro o costoso" (valía un cojón),
"dos" significa "valentía" (tiene dos cojones),
"tres" significa "desprecio" (me importa tres cojones),
un nº muy alto + "par" significa dificultad" (lograrlo me costó mil pares de cojones).

El verbo también cambia el significado.
"Tener" indica "valentía" (aquella persona tiene cojones),
aunque con signos exclamativos puede significar "sorpresa" (¡tiene cojones!);
"poner" expresa un reto, especialmente si se pone en algunos lugares (puso los cojones encima de la mesa).
También se los utiliza para apostar (me corto los cojones), o para amenazar (te corto los cojones).

El tiempo del verbo utilizado cambia el significado de la frase. Así, el presente indica "molestia o hastio" (me toca los cojones), el reflexivo significa "vagancia" (se tocaba los cojones), pero el imperativo significa "sorpresa" (tócate los cojones!).

Los prefijos y sufijos modulan su significado:
"a-" expresa "miedo" (acojonado),
"des-"significa cansancio" (descojonado),pero tambien puede significar diversion (descojonarse de tal cosa, me he descojonado por...)
"-udo" indica "perfección" (cojonudo),
"-azo" se refiere a la "indolencia o abulia" (cojonazo).

Las preposiciones matizan la expresión.
"De" significa "éxito" (me salió de cojones),
"cantidad" (hacía un frío de cojones),
"por" expresa voluntariedad (lo haré por cojones),
"hasta" expresa "límite de aguante" (estoy hasta los cojones),
"con" indica "valor" (era un hombre con cojones) y
"sin", "cobardía" (era un hombre sin cojones).

Es distinto el color, la forma, la simple tersura o el tamaño.
El color V, violeta expresa "frio" (se me quedaron los cojones morados),
la forma, "cansancio" (tenía los cojones cuadrados),
pero el desgaste implica "experiencia" (tenía los cojones pelados de tanto repetirlo).

Es importante el tamaño y la posición (tiene dos cojones grandes y bien plantados);
sin embargo hay un tamaño máximo: (tiene los cojones como los del caballo de Espartero) que no puede superarse, porque entonces indica "torpeza o vagancia" (le cuelgan, se los pisa, se sienta sobre ellos, e incluso necesita una carretilla para llevarlos).

La interjección "¡cojones!" significa "sorpresa", y
cuando uno se halla perplejo los solicita (manda cojones!).
En ese lugar reside la voluntad y de allí surgen las órdenes (me sale de los cojones).

En resumen, será difícil encontrar una palabra, en castellano o en otros idiomas, con mayor número de acepciones.

Salud Cojones!!!

sábado, enero 12, 2008

Hola de nuevo

Despues de los turrones, los polvorones, el cordero asado, los mazapanes y demas palos a los kilos me encuentro con algun kilito de mas y me pongo a navegar por internet en busqueda de recetas bajas en calorias, y me encuentro con esto...



Estoy horrorizada, no se si comerme un bocata de morcilla ahora mismo. La obesidad es perjudicial a largo plazo, pero esto... esto mata a corto plazo.